El rastro del municipio de Zapopan arroja aguas residuales con altas concentraciones de contaminación. La CEA demandó al Ayuntamiento ante la PGR, Profepa, Proepa y Conagua.
Por Sergio Hernández Márquez
El rojo de las aguas residuales del rastro del Ayuntamiento de Zapopan lo delatan. Este lugar expulsa el líquido contaminante sin tratamiento alguno afectando un arroyo que termina en el Río Santiago, por lo que el municipio tendrá que responder una serie de demandas interpuestas ante la Procuraduria General de la República (PGR), la Comisión Nacional del Agua (Conagua), la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y la Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (Proepa).
Quien demanda es la Comisión Estatal del Agua (CEA), dependencia que tomó muestras ante Notario Público, las certificó y ahora son parte de las pruebas en las que da cuenta, por ejemplo, que la concentración de Demanda Bioquímica de Oxígeno está arriba de mil por ciento de lo permitido por las normas mexicanas.
«No lo dice la CEA, lo dicen los vecinos de ahí mismo que un día huele a estiércol a más no poder y al día siguiente les huele a perro muerto, de que no tiran los lodos de los corrales del rastro tiran desechos de sangre, de vísceras, de pezuñas, de huesos, de carne y de cuero», comentó Héctor Castañeda, director de Sustentabilidad de la dependencia.
“Las demandas están en contra de quien resulte ser el representante legal del rastro municipal de Zapopan. El hecho es que alguien debe hacerse responsable de una descarga y una contaminación producida a través de los desechos del rastro”.
Fue el 8 de marzo cuando se interpuso la primera denuncia ante la PGR y un día después ante la Conagua, Profepa y Proepa.
“Cabe mencionar que estas acciones (la toma de muestras) fueron realizadas ante notario público, en el momento preciso en que el rastro descargaba de manera irregular”, subrayó Castañeda Nañez.
La dependencia calcula que como mínimo se expulsan 173 mil litros por día, tomando en cuenta una tubería de 4 pulgadas, pudiendo llegar la descarga hasta a 216 mil litros.
Para subrayar, la CEA asegura que lo que expulsa el rastro de Zapopan es más contaminante que los registros promedio detectados en Paso de Guadalupe, uno de los sitios más degradados del Río Santiago.
Fueron tres las ocasiones en las que funcionarios de la CEA visitaron el rastro: el 14 y 28 de febrero, y el 12 de marzo, tomando muestras para verificar si las aguas residuales cumplían con la Norma Oficial Mexicana NOM-ECOL-1996 que establece los límites máximos permisibles de contaminantes en las descargas de aguas residuales en aguas y bienes nacionales.