En el documento se incluyeron diversas modificaciones que aportaron distintos organismo. Foto: EL INFORMADOR
Leticia Fonseca – EL INFORMADOR
Tras posponerse dos semanas su aprobación luego de recibir una serie de observaciones por parte de distintos sectores, el Congreso del Estado dio luz verde por unanimidad al Código Urbano de Jalisco, que contiene alrededor de 400 artículos.
Al resaltar que en el documento se incluyeron diversas modificaciones que aportaron distintos organismos, el presidente de la Comisión de Desarrollo Urbano e impulsor del código, diputado Iván Argüelles Sánchez, manifestó que los opositores a su aprobación son quienes se han beneficiado de las lagunas que existen en la ley.
Destacó que el Código Urbano significará un cambio total en las formas de planeación y en el ordenamiento territorial de la ciudad, y confirmó que uno de los principales cambios incluidos en el código se refiere a la eliminación de los planes de urbanización. Además se determinó duplicar la participación ciudadana en el Consejo Estatal de Desarrollo Urbano (CEDU), en lugar de dos serán cuatro posiciones.
Las áreas de cesión aumentan de 15 a 16%, y no se permitirá permutas por dinero; también se establecen distancias mínimas de 500 metros entre cada anuncio espectacular y que no excedan los 18 metros de altura; entre muchas otras modificaciones.
Diferendo con el Cesjal El tema del Código Urbano generó un diferendo entre diputados y el Consejo Económico y Social del Estado de Jalisco (Cesjal). El legislador Enrique Alfaro Ramírez, cuestionó que el organismo critique al Congreso sobre este tema, cuando presentó una recomendación cuyas observaciones fueron “pirateadas” de un documento del Consejo Estatal de Desarrollo Urbano (CEDU).
Dijo que esta situación, obliga a evaluar el desempeño del organismo para revisar si se justifica que le estén destinando un presupuesto cercano a los 15 millones de pesos anuales.El presidente del Cesjal, Tomás López Miranda aclaró que el documento del CEDU se tomó para incluirlo en la recomendación a los diputados porque formó parte de las consultas que el Cesjal hizo en el tema del Código Urbano.
Recordó que los legisladores debieron observar el documento que recibieron completo y no solamente su anexo ya que las consideraciones jurídicas que se plasmaron en la recomendación del Cesjal debieron atenderse para no afectar los derechos de los ciudadanos, dándole una gran discrecionalidad a la autoridad.
López Miranda pidió al Congreso que, independientemente de la aprobación del Código, ofrezca una respuesta a la recomendación y se dijo atento a la actuación del Poder Ejecutivo sobre la promulgación de la nueva legislación porque “cuidar los derechos y el bienestar de los ciudadanos vale mucho más que cualquier presupuesto”.