Sergio Hernández – MURAL
La empresa que realiza la obra, Constructoras y Carreteras, no sabe cuándo estará funcionando, sólo aseguran que laboran para que sea lo más pronto posible.
En la zona de trabajo, a la altura de la Colonia La Azucena, en El Salto, los empleados realizan sus tareas a toda prisa, construyendo los registros que hacen falta para que, si hubiera alguna falla, reparar la tubería con mayor facilidad.
Ayer al mediodía, la directora de la oficina de Comunicación Social de la Seder, Cinthia María García Maldonado, aseguró que la obra estaba ya en los últimos detalles, haciendo pruebas de hermeticidad para que pudiera funcionar entre la tarde del lunes o a más tardar hoy.
Pero bastó con una visita a la zona de trabajo para comprobar que no será posible dejar funcionando el colector antes de el jueves, a menos que el desvío de las aguas negras se realice con la obra sin terminar.
El colector canalizará las aguas negras del Arroyo del Ahogado para ya no conducirlas a cielo abierto sino por una tubería que evitará la acumulación de líquido residual en la represa que existe sobre el Río Santiago, a la altura de las poblaciones de El Salto y Juanacatlán.
Los trabajadores que realizan la obra trabajan por lo menos de las 8:00 a las 18:30 horas, entre olores fétidos que genera el arroyo por la descomposición de materia orgánica y fecal de los habitantes del sur de la zona metropolitana.