La declaratoria ha sido solicitada por pobladores de Juanacatlán y El Salto; Gobierno del Estado y Congreso dicen no a las propuestas.
Evelyn Aguila y Leticia Fonseca – EL INFORMADOR
Al tiempo que los diputados del Congreso local rechazaron declarar emergencia sanitaria en Juanacatlán y El Salto, el Poder Ejecutivo negó la posibilidad de una declaratoria de emergencia ambiental en este mismo sitio, pese a que la semana pasada falleció el niño Miguel Ángel López Rocha intoxicado por arsénico, presuntamente proveniente del contaminado Río Santiago.
Fernando Guzmán Pérez Peláez, secretario general de Gobierno, aseguró en rueda de prensa que la problemática de contaminación del Río Santiago no está fuera de control, y que las medidas a corto y largo plazo que planean son suficientes para que vuelva a estar limpio.
“La emergencia ambiental está prevista en la legislación federal, pero no hay una regulación precisa de cómo proceder, y aquí no estamos en este momento en una situación que esté fuera de control. Ha habido un problema, hay una contaminación que es indudable, hay un atraso y un rezago histórico que está a la vista.
“El asunto se ha agudizado, pero las decisiones que se han tomado en coordinación del Gobierno del Estado con las instancias federales y estatales involucradas, nos dan para resolver este asunto, no es necesario declarar una emergencia. ¿En qué sentido? ¿Con qué alcance? ¿Para qué?”, cuestionó, al tiempo de subrayar que “las emergencias se declaran para atender una contingencia y resolverla”, situación que a su juicio no se ha presentado.
Ayer, en el Congreso estatal se votó en contra de una propuesta de punto de acuerdo para que se declare zona de emergencia sanitaria en el punto más crítico de polución de Río Santiago, ubicado a la altura de Juanacatlán y El Salto. El rechazo fue de la mayoría panista, 20 diputados, por 16 votos a favor de la oposición.
El coordinador de los diputados del Partido Acción Nacional (PAN), Jorge Salinas Osornio, argumentó que no se justifica la declaratoria de emergencia sanitaria, ya que ésta se solicita cuando el Gobierno del Estado reconoce que no cuenta con los recursos suficientes, o carece de la capacidad operativa para hacer frente al problema (en este caso las consecuencias de la contaminación del Río Santiago), y esto no ha sucedido en Jalisco.
Esta emergencia sanitaria también fue solicitada por expertos integrantes del Tribunal Latinoamericano del Agua, quienes además responsabilizaron a las autoridades de la grave contaminación. Ayer, diversos Organismos No Gubernamentales de Jalisco pidieron —mediante un comunicado— se emitan estas declaratorias.
Desviarán aguas negras
En Casa Jalisco, Fernando Guzmán anunció luego de una reunión con autoridades en materia ambiental de los tres órdenes de Gobierno, que hoy arranca la construcción del colector que correrá de forma paralela al Río Santiago, para desviar las aguas negras del Arroyo El Ahogado, evitando así que la contaminación se acumule en la confluencia de Juanacatlán y El Salto, donde se forma una pestilente represa que provoca la proliferación de lirio y mosquitos.
Esta obra, que tendrá una longitud de