Se unieron todos en una sola voz para exigir una y otra vez la suspensión de cualquier actividad que le reste superficie al bosque y la implementación de un blindaje legal que no permita la densidad de alta población: «¡Gobierno, respeta nuestro espacio!»
Evelyn Águila – EL INFORMADOR
«¡Ni un metro menos al Bosque Los Colomos!» fue el grito que marcó la manifestación protagonizada por vecinos del área protegida, quienes denuncian la autorización de construcciones inmobiliarias y el desmonte de árboles en 1.5 hectáreas.
La caravana invadió uno de los cuatro carriles del trayecto de la Vía RecreActiva, desde la Glorieta Minerva hasta el Centro de Guadalajara, donde simultáneamente el alcalde tapatío, Alfonso Petersen, celebraba el Día de la Bandera.
Las consignas en repudio por la falta de control y aprobaciones «ilegales» en terrenos contiguos al bosque, no lograron ser escuchadas por el primer edil, quien rumbo a las 09:40 concluyó los festejos cívicos, minutos antes de que los vecinos arribaran a la Avenida 16 de Septiembre.
Ahí, frente a la Catedral de Guadalajara se unieron todos en una sola voz para exigir una y otra vez la suspensión de cualquier actividad que le reste superficie al bosque y la implementación de un blindaje legal que no permita la densidad de alta población: «¡Gobierno, respeta nuestro espacio!», exigían.
Contrario a lo que sucede en la mayoría de las manifestaciones donde cargan cartulinas de papel pintadas con crayones de colores o plumones, en esta lucieron grandes mantas plastificadas. Todos llegaron muy bien uniformados: gorra en color verde y playeras blancas en las que destacó el slogan «No a la destrucción».
Jorge Tostado Farrera, vocero del Comité Salvemos Los Colomos, señaló que las manifestaciones no cesarán mientras sus peticiones no tengan eco en las decisiones del ayuntamiento tapatío que actualmente encabeza Alfonso Petersen.
«Estamos aquí contra los voraces que quieren construir y se están comiendo el Bosque Los Colomos en circunstancias muy sospechosas. Venimos a exigirle a las autoridades que cumplan con su deber. Tienen que gobernar para todos, no sólo para un partido. Nosotros no tenemos color de partido, pero queremos que salven el bosque, es un espacio ya muy chico».
Insistió en que el Gobierno estatal cuenta con todas las herramientas legales y jurídicas para defender el territorio natural de Los Colomos, considerado un área hidrológica muy importante.
La poda de árboles en los 15 metros cuadrados de árboles, se llevó a cabo a finales del mes pasado de enero en los límites del bosque conocido «Retorno del Torreón».
«Metieron máquinas adentro y devastaron 15 mil metros cuadrados de árboles y no nos han dado ninguna explicación. No es posible que pasen estas cosas sin que la ciudadanía haga nada. Es muy grave lo que está pasando».
La manifestación partió poco antes de las 09:00 horas, donde no se registró ningún incidente, pese a que en un principio organizadores de la Vía RecreActiva no querían la marcha sobre el trayecto de este espacio, decisión de la que finalmente desistieron.
Mientras voceros del organismo Salvemos Colomos estiman que a la marcha se sumaron tres mil personas, Bomberos de Guadalajara calcularon poco menos de mil manifestantes.
Advierten daños ambientales
A pesar de que el área desmontada, «Retorno del Torreón», no está dentro del polígono protegido, Jaime Eloy Ruíz Barajas, investigador de la Universidad de Guadalajara (UdeG), aseguró que el derribo de árboles en esta zona, sí afecta la conservación de Los Colomos.
El experto aclaró que aunque sea una superficie colindante, el plan parcial de urbanización y zonificación establecen que no puede haber edificaciones o terrenos menores a 800 metros cuadrados, ni torres, al igual que construcciones multifamiliares.
«Por otro lado, hay área de protección al acuífero que es otro tipo de leyes que hay que vigilar al respecto. Tiene que haber nuevas disposiciones legislativas que blinden al área protegida, que no permitan alta densidad en cuanto a construcciones».
Sostuvo que el restarle espacio verde provoca cambios en el micro clima de la zona, además de dificultar la absorción del agua de lluvia, es decir, no se infiltra al subsuelo, «de tal manera que aguas abajo de la cuenca de lo que es la subcuenca Atemajac o cuenca hidrológica Los Colomos, hay estragos».
Por ello, reiteró que es urgente el cumpliendo de la Ley de Desarrollo Urbano y que los planes parciales fijen claramente los criterios ambientales para conservar el área.