¿Y si reflexionamos el mundo con la visión de los animales? El reto que nos propone María Ospina

Por: Sergio Hernández Márquez

29 de noviembre de 2023.-Cómo nos relacionamos con los animales, con esos otros seres vivos con sentimientos y que muchos los siguen viendo como si fueran cosas con movimiento. Ante ello Mariana Ospina nos pone a reflexionar sobre esto en su libro “Sólo Un Poco Aquí”, ganador del Premio de Literatura Sor Juana Inés de la Cruz 2023.

La autora colombiana confiesa que su interés en la obra era plantear entre líneas que nos hiciéramos una serie de preguntas al ver la vida a través de los ojos de diversos animales, ya sea un ave, un escarabajo, perros, libro que parte de su curiosidad de observar la vida de los perros callejeros en Bogotá.

Para María Ospina, incluir de manera responsable a los animales en las acciones de vida de los seres humanos es uno de los temas más importantes en la actualidad y lo trata de plantear un poco así: “¿Qué sucede con las aves migratorias que todos los años han llegado a un bosque y de repente ya no está?”.

No niega que el detonante para el libro, cuenta Mariana Ospina, es un escrito de Miguel de Cervantes Saavedra que se llama “El Coloquio de Los Perros”, donde perros callejeros reflexionan sobre el mundo y las preguntas que hacen las considera maravillosas.

“Con Cervantes yo siempre estuve como inclinada de alguna forma y también por mi vida cotidiana a pensar en el perro de la calle y en su soberanía y en su resistencia, en su inteligencia y cómo complicaba esta visión del animal doméstico y de animal de compañía y nos permitía pensar como en otras dimensiones”, comentó la autora en la presentación de su obra durante la Feria Internacional del Libro de Guadalajara.

“Siempre he sido una gran observadora de los perros callejeros de Bogotá y quería escribir sobre eso y también con respecto al abandono unos años antes de escribir este libro me encontré a una perra que había sido abandonada en un parador de una carretera colombiana y finalmente la adoptamos, vivió los últimos años con nosotros, estaba muy herida, se llamaba Mona y es también un homenaje de este libro a ella, y eso me hizo pensar mucho en los mecanismos de pedirles a los animales de compañía que nos acompañen y después abandonarlos, que pasa todo el tiempo. Esa necesidad que tenemos de que solucionen nuestros propios abandonos y que estén siempre ahí…”

A final de cuenta señala que en su cabeza se vino toda una reflexión de cómo es que vivimos en un mundo en el que hay una convivencia cotidiana de interespecies donde se da también el sufrimiento animal por lo que en su obra los pone como a personas no humanas centrales para la vida cotidiana.

“Es algo con lo que yo crecí, en parte con mi vida en el campo en Colombia pero es algo que de alguna manera se plasma ahí”.

Aclara que si bien no es un libro autobiográfico, en alguna ocasión se encontró con un ave por ahí del 2007 en Bogotá, estaba de paso en la ciudad porque Ospina vive en Estados Unidos y era una tangara escarlata con la que le llevó a reflexionar sobre un tipo de movimiento diferente a las dos perritas que también son personajes de su libro.

De hecho recuerda que la tangara escarlata le llevó a pensar como la migración es un movimiento muy valiente del que se tenía que hablar.

Entonces surgió un cuento para niños que pudo publicar con el paso de los años, pero se le quedó la idea de por qué no hacer una obra de ficción que tocara estos temas donde se reflexione la vida a través de los ojos de los animales.

El libro también es un reto de pasar del pensamiento de la psicología humana y pasar desde la ficción en esos testigos animales que son más que humanos y en esa relación del humano que se conmueve y el ave que en un capítulo atestigua al humano conmovido.

La entrega del premio

La escritora colombiana María Ospina recibió el Premio Sor Juana Inés de la Cruz de manos de la directora de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL), Marisol Schulz Manaut, en el auditorio Juan Rulfo.

Contó que el día en que se enteró del premio estaba en un barrio antiguo de Madrid y cerca de una estatua de la escritora, hasta la que fue como una especie de ritual para agradecerle y dejarle una flor en la mano de piedra para la que fue ayudada por su hijo de 10 años.

Schulz Manaut recordó que este reconocimiento fue concebido y bautizado por la escritora nicaragüense Milagros Palma, en 1993, para reconocer el trabajo literario de las mujeres que publican en el mundo hispanohablante.

La escritora Sara Poot Herrera, presidenta del jurado, señaló que la novela premiada fue elegida por unanimidad entre 106 candidaturas por ser “un bello y elaborado ejercicio de escritura creativa”.

Expresó que, de acuerdo con el acta resolutiva del jurado del premio “lo más meritorio e importante de la novela de María Ospina Pizano es que está dedicada a los seres vivos que nos rodean, y que normalmente o ignoramos o nos comemos o los usamos sin pensar y tienen” y destacó que “en Solo un poco aquí los pocos protagonistas, que no personajes, humanos son todas mujeres, compasivas y comprometidas con su comunidad”.

Ospina Pizano es autora del libro de cuentos Azares del cuerpo, publicado en Colombia, Chile y España y traducido al italiano y al inglés, y por el cual fue preseleccionada al Premio Hispanoamericano de Cuento Gabriel García Márquez en 2018. Ha escrito extensamente sobre memoria, violencia y naturaleza en la cultura colombiana contemporánea, incluyendo el libro El rompecabezas de la memoria: Literatura, cine y testimonio de comienzos de siglo en Colombia.