Por: Emily Benitez y Francisco San Juan
23 de mayo de 2021.-El atardecer cae, para ser más exacto son las 6:45 pm. El calor se intensifica en el trabajo, el horno comienza a elevar la temperatura dentro del lugar, los pedidos inician, es momento de meter presión.
Muchas pizzas para llevar, la hawaiana es la que más vende, después de unos minutos se termina la piña, es tiempo de picar un poco más, despide un olor dulce y agradable. Pasa una hora y el trabajo para, el horno se apaga pero el calor aun corre por la instalación, salir a tomar un poco de aire fresco es la solución.
Sentada al borde de la banqueta, debajo de un árbol de naranja agria, afuera de la pizzería y a la derecha un cajete con pasto, pequeños escarabajos, hormigas y otros bichos rastreros lo rodean, mientras que algunos se refugian entre la hierba y al pie del árbol, también se acercan mariposas, revoloteando por las calles, al instante se detiene entre las ramas del naranjo, que bonita es la naturaleza.
Uno que otro zumbido es de escuchar que las abejas también están cerca del lugar, una de ellas entra a la pizzería, esta empieza a chocar; confundida y moribunda, aterriza al suelo y comienza a girar, después de su agonía muere.
Luego de unos minutos pasa una camioneta entre las calles, sobre ella está montada una bomba que nebuliza y de este esparcir un gas apestoso, se puede percibir su olor, ¡es la fumigadora! comenta un cliente, claramente es temporal de dengue, hay mucho zancudo en la calle picando a la gente, en las noticias ya han comunicado gran cantidad de casos y una que otra muerte ¿Será más grave que el año pasado?
Es hora de regresar al puesto de trabajo, el teléfono vuelve a sonar. Mientras tanto más insectos empiezan a entrar, todos desorientados por el insecticida que acaban de arrojar. Otras veces ingresan abejas a la cocina buscando la piña recién cocida, pero ahora más de una se encuentra confundida.
El olor se dispersa, pasan las horas y se olvida el suceso, a nadie parece importarle. Terminó la jornada laboral, antes de salir es un requisito limpiar. Al sacudir el polvo y barrer el piso aparecen zancudos muertos, moscas, abejorros y otros, parece un panteón ¿Esto no es la solución? Buscar alternativas menos tóxicas cabe protestar. Pero la sociedad decide seleccionar un químico para acabar más fácil con su problema, sin piedad de lo que pueda provocar.
Aedes aegypti
En las últimas décadas las enfermedades han incrementado rápidamente. En lo particular las transmitidas por virus provenientes de animales, derivando problemas de salud pública, social y ambiental.
Existe un vector proveniente de África, que subsiste y se reproduce en las aguas estancadas esta especie es nombrado Aedes aegypti, una zancudo de origen subtropical y tropical, es el principal portador del virus dengue y hoy en día se convertido en una amenaza mundial.
“A partir de su reintroducción a México en 1978, después de haber sido erradicado durante 12 años, el dengue se convirtió en un problema de salud pública.” Indica un artículo de la editorial Elsevier, de autoría Torres y Cortés (2014).
Las administraciones gubernamentales, junto a las secretarías de salud, trabajan conforme a este mosquito, empleando métodos para disminuir la tasa de morbimortalidad en las comunidades y a su vez disminuir la población de esta especie.
Es importante el desarrollo y aplicación de mecanismos, puesto que las enfermedades transmitidas por insectos representan el 17% en enfermedades infecciosas, esto de acuerdo la coordinadora del programa estatal de vectores Cassandra Acosta y Jorge Castillo, jefe de departamento de vectores (2020).
Panorama epidemiológico
Ante dicha situación surge el siguiente cuestionamiento; ¿Qué alternativas pueden ser utilizadas sin que generen externalidades negativas? Ya que el uso intensivo de insecticidas tiene consecuencias como daños a la salud, repercusiones a los ecosistemas directamente o indirectamente esto desarrolla una problemática socio-ambiental. Para corroborar apelamos a un ejemplo al estado de Jalisco, resaltando que, para la semana 53 del panorama epidemiológico en cuestión representa el primer lugar de casos sobre la federación, esto anuncia la Secretaría de Salud (2020).
Como demuestra en la gráfica anterior, el estado de Jalisco expone 5 mil 362 casos confirmados por dengue en el año 2020, siendo que ha disminuido la cantidad de casos en comparación al año 2019, misma que superó los 10 mil casos. El estado sigue posicionado como principal acreedor y transmisor del vector, así lo demuestra el estudio del Sistema Especial de Vigilancia Epidemiológica de Dengue.
De esta forma el estado de Jalisco implementa estrategias para el control de plagas, por medio del rociado de insecticida, señalando que, en municipios del estado, incluido Zacoalco de Torres se realiza esta práctica de nebulización. El ejecutar esta estrategia continuamente, permite el desarrollo a resistencia del vector y además conseguir la pérdida de especies fuera del objetivo. Entonces ¿Cuáles es el insecticida que se emplean y qué componentes químicos contienen? A nivel estado, el gobierno recomienda los químicos categorizados como piretrinas y piretroides.
La aplicación urbana del insecticida
Dentro de este grupo característico, encontramos deltametrina y permetrina siendo componente principal en el producto KOTHRINE WG25 200X25 GR BAG MX ( 11267.031 ) y, también el KOTHIRINE WG25 200X25 GR BAG MX ( LX22000024 ), mismos utilizados en el estado de Jalisco. Así lo indica la carta a la secretaría de salud del estado de Jalisco en dirección al programa de Dengue.
Por ello es importante dar a conocer quién realiza la aplicación de insecticida ya que este afecta al medio ambiente y salud, por medio de la entrevista a la Directora de Gestión de Calidad de Aire, Estefany López Murillo, de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (SEMADET). declara.
“Se publica un listado que posteriormente comunica a los estados y a los municipios que cuando ellos quieran aplicar un insecticida en alguna campaña, quién tiene la responsabilidad de aplicarlo va a ser particularmente el sector de salud, de manera que va a depender una presencia de esos casos en los que decidan que habrá zonas en los que hay aplicar mayor cantidad o algún tipo en particular de estos insecticidas”(sic.)
Es por ello que a nivel municipal los centros de salud del estado tiene la facultad de determinar la zona de fumigación. Durante una entrevista con un integrante (Anónimo) del cuerpo de Protección Civil del municipio de Zacoalco de Torres alude lo siguiente, (sic.)“se supone que debería ser todo el municipio y todas las delegaciones, ya pues, si se le da prioridad a las delegaciones donde haya más casos de dengue”
¿Y esos casos se reportan en el centro de salud y después se lo dicen a ustedes? “Si el centro de salud los manda directo al delegado, al que se encarga de eso» (sic.) por ende, confirma que el centro de salud es quien controla la aplicación del insecticida
A continuación, se muestra una carta de la Secretaría de Salud del Estado de Jalisco donde autoriza el uso y la aprobación en laboratorios, corroborando para el uso del insecticida.
También la Directora de Gestión de Calidad de Aire expone. (sic.) “toda esta familia de las piretrinas y piretroides, están reguladas y tienen un aval para utilizarse en las campañas, sobre todo para control de vectores”, en consecuencia tenemos externalidades negativas provenientes al utilizar estos insecticidas, “ya hay investigaciones que se han dirigido para poder identificar como sí tienen efectos nocivos, no solo para un tipo de fauna que también es benéfica, sino que también en seres humanos y para otros animales de mayor tamaño”, así mismo, podemos incluir que “todas estas son distinciones que se hacen de cajón en el análisis de epidemiología o de control epidemiológico que tiene las secretarías de salud” señaló la Directora.
El municipio de Zacoalco de Torres hace uso de otro insecticida compuesto de permetrina y esbioaletrina, llamado “Aquareslin”, lo afirma un elemento de protección civil (Anónimo). Así mismo especifica las cantidades de insecticidas que utilizan, a lo que él señala que lo mezclan con agua “realmente utilizamos un 25% del insecticida y 75% es agua, para realizar la práctica de fumigar”(sic.).
Etiqueta del insecticida que utiliza el municipio de Zacoalco de Torres, obtenido de la página web BAYER, recuperado el 19 de agosto del 2020.
Para lo cual menciona que utilizan bombas nebulizadoras al igual comenta que reciben un curso para el manejo de maquinaria “los que manejan las bombas y que tienen mucho contacto directo con el insecticida, tienen que tener su equipo especial, lo que es cubrirse nariz y boca, e igual su overol, camisa de manga larga y guantes” afirma la persona de protección civil, así mismo agrega el alcance de esparcimiento del insecticida es de 10 metros cuadrados (sic.).
Pero, ¿cómo pueden utilizar otro insecticida? la respuesta es que “hay procesos de licitación pública que le aplican a todas las dependencias del estado que, con base a estos listados de sustancias permitidas es que ellos ya pueden, pues hacer que haya la compra, y por lo tanto la aplicación de estos compuestos” (sic.) señalada por Estefany López Murillo, directora de calidad del aire.
En el municipio de Zacoalco de Torres el proceso de fumigación comenzó aproximadamente en marzo del año 2020, así se declara en la página oficial del Ayuntamiento, también, se muestra la continua fumigación durante los meses de abril, mayo, junio, julio, septiembre, octubre del 2020.
Así mismo, podemos añadir que se tuvo un control en cuanto emplear el insecticida, ya que estas actividades las realizaban por lapsos.“Si todavía, ya cuando se termina de fumigar lo que es el municipio, de ahí siguen con las delegaciones, ya terminando de ahí se espera un poco tiempo, no sé , una semana, 15 días y ya se vuelve de nuevo con el municipio”(sic.) señala el funcionario de Protección Civil, sin embargo, esta variable se puede discriminar entre los rondines de fumigación a una colonia y los meses en que se realizó la práctica.
Discrepancia entre el estado y el municipio.
También, hubo intervención del Estado con campaña de fumigación en el Municipio, ante lo que el funcionario de Protección Civil declara dentro de la entrevista (sic.)“Si bueno, ya pasan fumigando por parte del estado, si así que son dos separadas”, al igual señala la utilización del otro insecticida ya mencionado anteriormente, Kothrine. ¿Ellos utilizan el mismo químico? “No, ellos utilizan uno diferente, porque me he fijado que el de ellos abarca más espacio, traen la bomba ya en la camioneta y otros la traen ya manuales” (sic.), sin embargo, declaró que “ellos agarran sus propias rutas, y ya es aparte, pero son muy escasas las veces que han venido” (sic.).
Inclusive se puede determinar que en el Municipio se utiliza la deschatarrización, pero la estrategia de fumigación, fue lo primordial, “Pos´ nada más el centro de salud ha dado los boletines o información de lo que hay que hacer, o cómo prevenir, ya por parte del ayuntamiento hicieron el programa de la deschatarrización, de tener que tirar todo lo que pueda acumular agua” así lo indicó el funcionario de Protección Civil, aludiendo que, para realizar esta actividad, (sic.) “nada más se pasó la voz, otra cuadrilla aparte fueron quien la recogió” argumentando que “hay gente que si sacaba todo lo que tenía que pudiera acumular, hay mucha gente que no”, sin embargo, el destino de la chatarra es de cuestionarse, “la llevan al vertedero a tirar, ya el vertedero está muy lejano de la población”.
La actitud apática de la comunidad
En definitiva, el uso de insecticida para controlar el vector se ha vuelto una estrategia eficiente o la más cómoda y práctica para los entes políticos en este problema socio-ambiental, paralelamente los casos de dengue, en comparación con el año anterior, 2019, sí se han reflejados resultados, en cuanto compete al Estado, pero esto no quiere decir que le corresponde al hecho de utilizar insecticidas indiscriminadamente. Sobre esta práctica el funcionario de Protección Civil señala que no existe un cambio, (sic.) “Pues… muy poco, porque la gente sigue acumulando lo que podría tener agua, y a la gente que ya le ha pasado lo del dengue, son los que más se preocupan por su familia”.
Así mismo la respuesta de las personas es poco participativa por lo que la directora de calidad del aire comenta por medio de una entrevista. (sic.)“ la gente prefiere comprar insecticida a tapar sus almacenamientos de agua, es mucho más sencillo que lo tengan descubierto, es ahí donde se va a reproducir el mosquito, en lugar de estar comprando un montón de insecticidas y no sepas que tiene, además lo aplicas en toda tu casa y dices, ah pues está padrísimo porque aparte se me murieron las cucarachas y se me murieron las arañas, pero también mataste las abejas, mataste las lagartijas y esto tiene otro efecto”. Por lo que la cuestión es ¿Cuáles son las repercusiones en el medio ambiente al emplear la estrategia de fumigación?
- DNG: Dengue No Grave.
- DCSA: Dengue con Signos de Alarma.
- DG: Dengue Grave.
Negligencia del insecticida
La lucha incontrolable del ser humano contra el mosquito vector de enfermedades, solo ha provocado daños colaterales principalmente en el medio ambiente y otras especies no vectores, el insecticida se ha vuelto el mecanismo favorito para dar solución al exterminio de esta plaga, sin embargo, las consecuencias que puede provocar el uso excesivo de esta alternativa no han sido generosas hacia especies silvestre.
De acuerdo con la revista peruana de medicina experimental y salud pública (Devin y Eza, 2008) las consecuencias ecológicas del uso de insecticida causa gran preocupación. su objetivo específico es matar plagas de insectos y por consecuencia tienen un impacto letal o subletal en organismos que no son objetivo (recicladores de nutrientes del suelo, polinizadores de plantas y depredadores). Este proceso de fumigación ignora completamente la importancia de otras especies, mismas que son afectadas por este mecanismo para combatir el mosquito transmisor.
El uso exagerado de estos insecticidas acaba con la fauna que se interpone en su camino, el mal uso de químicos puede repercutir dentro del ecosistema “efecto deriva” provocando resultados adversos a los esperados, dañando la diversidad de insectos, acabando con cadenas tróficas y posiblemente la adaptación del insecto enemigo.
“El efecto deriva probablemente tiene un alcance de hasta 2 kilómetros a partir de donde estás aplicando, entonces esa molécula mínima o la última molécula que esté por ahí volando, puede que le toque a un insecto” así lo mencionó el biólogo Julio Alejandro Fletes Montes encargado del Centro de Apoyo al Desarrollo Rural (CADER) Zacoalco de Torres.
El alcance por el efecto deriva arrasa con la biodiversidad silvestre, en este caso la diversidad de insectos dentro de una zona urbana, al ser expuestos a químicos creados para acabar precisamente con ellos siendo que no son el objetivo, no deberían llamarse insecticida, sino biocida argumenta la bióloga y autora del libro, “primavera silenciosa” Rachel Carson (1962) quien hace una observación con respecto al uso de insecticidas y las consecuencias que provocan dentro del ecosistema, “no es mi propósito que los insecticidas sean descartados siempre, con lo que estoy en contra es el haber puesto potentes productos químicos ponzoñosos, sin discriminación alguna, en manos de personas total o casi completamente ignorantes de su poder dañino”.(sic.)
Los insectos son importantes para la estabilidad del medio ambiente, acabar completamente con ellos sería un gran error, las funciones de polinizadores, depredadores y recicladores de nutrientes regulan la estabilidad de la naturaleza.
La función de estos es vital para la humanidad, la ignorancia por querer acabar con ellos puede traer grandes consecuencias. “El uso de insecticida es un problema que tiene muchos aspectos, la situación cada vez es más grave, necesitamos entenderlo para actuar, a veces no pensamos en los insectos como animales realmente importantes y valiosos, pero son mucho más valiosos e importantes y dependemos de ellos más de lo que pensamos. (sic.)” así mencionó Monserrat Chaves, ciudadana de Zacoalco de Torres.
La protección de la fauna dentro de una zona urbana es complicada, existe un grupo que pueden ser protegidos de la exposición química de un insecticida, sin embargo, las especies silvestres no corren con la misma suerte.
El agrónomo y especialista en apicultura José Octavio Macías Macías argumentó, “hay bastantes polinizadores silvestres que no se pueden controlar, entonces si hay una aspersión durante el día, el apicultor puede tapar sus colonias, sus colmenas, pero no puede evitar que las poblaciones silvestres dejen de acercarse ahí, es imposible.”(sic) esto provoca un cambio en el paisaje, comenzando con la desaparición de especies, “empezando por las luciérnagas, los escarabajos, la disminución de insectos silvestres que pueden ser polinizadores; están disminuyendo y es casi seguro, todavía hace falta comprobarlo pero es casi seguro que es por la aplicación y el uso intensivo de insecticidas que hay.”(sic.) señaló.
La fauna silvestre no tiene a donde huir, las partículas del insecticida además de permanecer suspendidas en el aire, también pueden ser adheridas a otras superficies, complicando la supervivencia de otros insectos que no son el objetivo.
Estefany López Murillo directora de calidad del aire del estado de Jalisco, argumentó sobre el uso de insecticida utilizado para combatir el insecto vector del dengue, “estas sustancias son mucho más resistentes en el ambiente, pero no son determinantes para solo matar al mosquito aedes aegypti, también te van a matar cualquier otro insecto que esté ahí, sea bueno o malo, su estructura química ha sido modificada para hacerlas más estables con el ambiente, pero también va generando otra serie de problemas.”(sic.)
El uso de Permetrina y Deltametrina como componentes para exterminar el zancudo aedes aegypti (Dengue) se han vuelto muy dóciles para acabar con este insecto, sin embargo, la reacción no fue la misma hacia las especies silvestres dentro de la zona urbana.
Entonces las posibilidades son altas al estar en contacto con estas sustancias como lo es una abeja, una mariposa, un escarabajo etc., terminando con su vida y su función de polinizador, recicladores de nutrientes o depredador. Al primer contacto de esta sustancia acaban con ellos, con el simple hecho de tomar agua, polen o comer la hoja de una planta, así de fácil corren peligro de terminar intoxicados.
“Aplicar el insecticida te llevas de todo, benéficos y no benéficos, si incrementamos la dosis puedes tener el zancudo más resistente a esa molécula, si tienes una plaga estas matando el segundo eslabón de la cadena trófica, entonces estamos hablando de que el tercero ya no se va a comer el segundo y viceversa”(sic.) así comentó el biólogo Julio A. Fletes Montes sobre algunas de las consecuencias que genera el uso inapropiado y excesivo de un insecticida, es por ello que recomienda hacer uso sustentable y racional de estas sustancias para el cuidado de la biodiversidad.
Si bien existe una variedad de productos encargados para el exterminio de esta plaga transmisora de enfermedades, sin embargo, la venta y distribución de estos no es la adecuada, muchos de los productos llegan a México siendo exportados de otros países y con mala fama por el impacto ambiental que han provocado, por lo tanto, las restricciones no han sido las mismas dentro del país.
“Las ferreterías son sitios donde es muy riesgoso comprar productos químicos de este tipo, difícilmente sabemos cuáles son los compuestos que traen, hay algunas veces que solo portan con la etiqueta donde únicamente dice para qué sirve, pero no dice en específico lo que contiene, muchos están prohibidos y aunque hay una regulación de entrada en el país sabemos que no siempre se respeta” (sic.) así mencionó Estefany López Murillo directora en calidad del aire.
La muerte de polinizadores, depredadores, entre otros, es el precio que se paga por conseguir el exterminio total del mosquito Aedes aegypti, acabar con este se ha vuelto el objetivo dentro del estado de Jalisco y el municipio en cuestión, la alta población de esta especie deja como única opción la exposición de sustancias químicas dentro de una zona urbana, sin importar los efectos adversos que genera.
Sin embargo, existen productos que dicen ser amigables con el medio ambiente. Las empresas químico-farmacéutica cuentan con productos orientados al cuidado del medio ambiente, prometiendo la conservación y preservación de los recursos naturales, pero, dónde queda la conservación de la fauna silvestre.
Engaño del insecticida
La distribución de un insecticida que porta el seudónimo “amigable con el medio ambiente” promete ser útil para acabar con plagas sin necesidad de perjudicar la naturaleza, en especial si este producto es utilizado para el control de vectores dentro de una zona urbana. Tratar de provocar un impacto ambiental a menor escala es su prioridad, pero, el juzgar el producto depende de los componentes químicos que lo integren.
Tras la investigación de los insecticidas implementados en el municipio de Zacoalco de Torres Jalisco, en específico, uno de los pesticidas fue detectado por ser categorizado como amigable con el medio ambiente, el insecticida, conocido como AquaReslin, indica ser un producto compuesto de permetrina y esbioaletrina, ambos componentes son clasificados en la familia de “piretroides”, dicho esto, la agencia de protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA, 2005)*6 indica que el manejo de piretroides en programas para el control de mosquitos no representa riesgos de alta toxicidad para animales mamíferos y aves, sin embargo, para especies como peces y abejas resulta ser muy peligroso.
Si bien, el uso de piretrinas y piretroides no indica ser letal para todas las especies silvestres, en insectos como abejas o escarabajos resulta ser muy tóxico. “Esa etiqueta que dice ser amigable con el medio ambiente no es tan específica porque no te dice en qué va o no va a perjudicar al medio ambiente, pero si son piretroides eso mata a los insectos y mata las abejas también” (sic.) comentó el investigador José Octavio Macías Macías.
El dar por hecho que un producto desempeñe la función de acabar con insectos buenos o malos no lo hace acreedor de ser amistoso con el ambiente, el biólogo Julio Alejandro Fletes Montes hace la comparación de un producto que vende la idea de ser favorable al consumidor y cómo este comparte el mismo gancho para su adquisición, referente a los insecticidas, “te voy a poner el ejemplo de un producto gaseoso que dice ser bajo en azúcares, si claro es bajo en azúcares respecto del original, eso no quiere decir que no tiene azúcar, es igual, solo es cuestión de márquetin, en lugar de tener una molécula al 100% tiene 90 u 80, esta como esta cuestión de las bolsas recicladas, pues está muy bien la cosa, pero sigue siendo plástico, nomás porque es reciclado, ahí es donde hay que trabajar, es cuestión de márquetin.”(sic.)
Así mismo sucede con los insecticidas que se anuncian como amigables con el medio ambiente y un mercado con individuos propensos a realizar cualquier acción que determine su máximo beneficio, sin embargo, las consecuencias dentro de un lapso se proyectan; entonces es cuando surge la pregunta ¿En realidad la estrategia que utilizan es la solución? Sí, pero en un determinado tiempo sería a corto plazo generando externalidades negativas a su paso y dando origen a problemáticas graves en un largo plazo. Entonces, es necesario un análisis crítico y deductivo de las propuestas en las estrategias que postulen externalidades positivas, sin ser acreedoras de grandes impactos a la salud y ambientales.
Alternativas
En la medida que la demanda de insecticidas incrementa, los consumidores buscan suprimir plagas de cualquier índole en áreas determinadas, se ha vuelto una práctica común e inconsciente, creando un pensamiento donde lo postulan como la única opción para el control del mosquito que porta el virus del dengue, aquí la pregunta es ¿Cuáles son esas otras estrategias que difunden un menor impacto ambiental o se postulan como benéficas?
Si bien, el cuidado y la protección del medio ambiente es un punto a contemplar hacia estrategias para el control de plagas transmisoras de enfermedades, el uso de repelentes de origen natural, creados con base en extractos de plantas son una buena alternativa para dar solución a este problema, siendo así el investigador Octavio Macías Macías aporta un ejemplo relacionado con la elaboración de repelentes naturales:
“La única manera de controlar la alta presencia de este mosquito es eliminar las larvas, entonces con el extracto de la flor del género de lupinos que se encuentra en el nevado de colima, se puede aplicar como las pastillas que reparten la secretaría de salud, las cuales son para ponerla en los depósitos de agua, esta sería una buena manera, la otra opción es el uso de extractos de otras plantas; de chile, de ajo, que también son efectivos para controlar a las poblaciones adultas, y además, la fase larvaria del mosquito.”(sic.)
El uso de sustancias compuestas por plantas es una buena estrategia para repeler y disminuir la proliferación de este insecto vector, sin embargo, existe otro mecanismo eficiente para combatir esta problemática. Dicho esto, se postulan diversas opciones bióticas para ser utilizadas como un control biológico, es decir el uso de depredadores endémicos para someter plagas, que, su objetivo predomina en disminuir la proliferación del mosquito vector.
El biólogo Julio Alejandro Fletes, señala un ejemplo de un depredador que predominó y cumplió con las facultades para ser implementado en el control biológico del sitio Autlán de Navarro, “los peces de la zona, de la familia goodeidos, que son los guppys, tienen que ser regionales, agarró un grupo de expertos, cultivó y los volvió a regresar y se comieron a estos bichos o zancuditos, entonces esa es una medida, ese es un depredador y una medida ya aprobada.”(sic.) Así mismo sugiere retomar esta práctica en el municipio de Zacoalco de Torres y en el estado de Jalisco, buscando un depredador endémico para el mosquito.
Sin embargo, en las últimas décadas se han desarrollado nuevos mecanismo para disminuir la población del mosquito, la comunidad científica propone la alteración genética, es decir, manipular mosquitos adaptados a la zona y generar durante la incubación machos estériles , esto de acuerdo a la coordinadora del programa estatal de vectores Cassandra Acosta y Jorge Castillo, jefe de departamento de vectores(2020) esta estrategia no libera agentes exóticos en el entorno y no introduce nuevo material genético en poblaciones existentes en la naturaleza, por lo tanto, la implementación de esta técnica opta por ser eficiente sin necesidad de provocar algún impacto ambiental en el ecosistema. Sin embargo, se pueden desarrollar diferentes alternativas que no incluyan un elemento ambiental como principal factor en la estrategia.
El comportamiento de las personas o un cambio de paradigma en las conductas de acumulación de chatarra e insalubridad que da origen al vector. En otras palabras, la responsabilidad no solo le compete al estado sino también a todos los individuos que conforman una población. Sin embargo, la falta de buenas prácticas e incidencia de información por parte de las dependencias como preventivas ante esta problemática de salud y medio ambiente es el resultado de los escenarios que se muestran en los panoramas epidemiológicos de dengue, “una manera de reducirlo sería poder estar cambiando está situación social que se tiene, que a veces es complejo o difícil para los gobiernos, como dotar servicios públicos de calidad a toda tu población o garantizar que tengan un servicio de recolección de basura diario. Entonces, donde vemos más casos de muerte es donde tienes más precariedad social. Muchas de estas estrategias han sido más efectivas estando dirigidas desde un enfoque socio ambiental, donde tu buscas primero como reducir la vulnerabilidad social y darle herramientas a la gente para que sepa cómo protegerse y cómo cuidarse, desde poner un mosquitero en su casa, hasta hacer un vaciado o un almacenamiento adecuado de agua, esto reduciría la población del vector”. (sic.) argumenta Estefany López Murillo, directora de calidad de aire.
En este sentido sería un instrumento de política pública que incorpore la gobernanza, refiriéndose que existe una interacción entre los gobernantes y la población, incidiendo en ellos y provocando la inquietud y la búsqueda de buenas prácticas preventivas aplicadas en la sociedad. Si bien, el implementar estrategias que ayuden a reducir el uso indiscriminado de insecticidas para combatir el vector de dengue generaría un cambio de paradigma positivo dentro del ecosistema urbano promoviendo también beneficios que se manifiesta hacia las personas de la comunidad, como menciona la ciudadana Monserrat Chavez Castillo:
“creo que eso es un problema donde no logramos ver o entender la magnitud que nos concierne a todos. Tiene muchos aspectos, y cada vez está la situación más grave. Necesitamos entenderlo para poder actuar y hacer algo al respecto, porque ya hablar de un insecticida es meternos con los servicios que estos insectos nos ofrecen, y es todo un tema, ya que todo está conectado”(sic.). Concluyó.
Siendo así, para que este problema disminuya es necesario la participación de la población haciendo uso de prácticas para evitar la proliferación de esta especie, dando como resultado el uso innecesario de sustancias nocivas que acaban con insectos benéficos y sin afectar el ecosistema que los rodea.
Referencias:
1 Torres-Galicia, I., & Cortés-Poza, D. (2014, 1 julio). Dengue en México: incremento en la población juvenil durante la última década. Boletín Médico del Hospital Infantil de México, 71(4). https://www.elsevier.es/es-revista-boletin-medico-del-hospital-infantil-401-articulo-dengue-mexico-incremento-poblacion-juvenil-S1665114614000045
2 González Acosta, C., Cime Castillo, J., & Correa Morales, F. (2020, marzo). Control integrado de vectores en México. Ciencia, 71(1). https://www.amc.edu.mx/revistaciencia/images/revista/71_1/PDF/09_71_1_1207_Control.pdf
3 Secretaria de Salud. (2020, 19 octubre). PANORAMA EPIDEMIOLÓGICO DE DENGUE SEMANA EPIDEMIOLÓGICA 42, 2020. Panorama Epidemiológico de Dengue 2020. https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/586948/Pano_dengue_42_2020.pdf
4 Devine, Gregor J., Eza, Dominique, Ogusuku, Elena, & Furlong, Michael J.. (2008). Uso de insecticidas: contexto y consecuencias ecológicas. Revista Peruana de Medicina Experimental y Salud Pública, 25(1), 74-100. Recuperado en 30 de junio de 2020, de http://www.scielo.org.pe/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1726-46342008000100011&lng=es&tlng=es.
5 Carson, R. (20-01-25). Primavera silenciosa. (Raquel Zarazaga, narr.) [Video]. YouTube. (original publicado en 1962). https://www.youtube.com/watch?v=WnNrDcql9sc&t=2776s
6 Environmental Protection. Agency (2005). Pesticides Mosquito control. Permethrin, Resmethrin, Sumithrin: Synthetic Pyrethroids For Mosquito Control. U.S.A. Título disponible en: http://www.epa.gov/pesticides/health/mosquitoes/pyrethroids4mosquitoes.htm Consultado en: Noviembre 2020